Suelo Pélvico y Postura Corporal: 5 Secretos para 2025

La conexión entre el suelo pélvico y la postura corporal es uno de los secretos mejor guardados de nuestro bienestar físico, una relación fundamental que a menudo pasamos por alto hasta que aparecen el dolor y la incomodidad. Comprender por qué el suelo pélvico es clave en la postura corporal no solo es esencial para resolver problemas de espalda o cadera, sino también para mejorar nuestro rendimiento deportivo, recuperarnos eficazmente tras el parto y vivir sin las limitaciones del dolor crónico. Este conjunto de músculos, situado en la base de la pelvis, actúa como el cimiento de nuestro tronco. Si este cimiento es débil o disfuncional, toda la estructura que soporta —la columna vertebral— se desequilibra, generando una cadena de compensaciones que puede manifestarse como lumbalgia, cervicalgia o incluso dolores de cabeza. En Danai Fisioterapia, en Boadilla del Monte, nos especializamos en desentrañar estas conexiones para ofrecerte una solución integral y duradera, abordando la causa real de tu malestar.

La función estabilizadora del suelo pélvico: el ancla de tu columna

Para entender por qué el suelo pélvico es clave en la postura corporal, debemos visualizarlo como la base de un cilindro que conforma nuestro «core» o núcleo estabilizador. Este cilindro está formado por el diafragma en la parte superior, los músculos abdominales profundos (como el transverso del abdomen) en la parte delantera y lateral, los músculos multífidos en la espalda y el suelo pélvico en la parte inferior. Todos estos músculos trabajan en sinergia para gestionar la presión interna del abdomen y proporcionar un soporte dinámico a la columna vertebral. Cuando el suelo pélvico está debilitado (hipotónico) o excesivamente tenso (hipertónico), esta sinergia se rompe. Un suelo pélvico débil no puede ofrecer un soporte adecuado desde abajo, lo que obliga a otras estructuras, como los músculos lumbares o los abdominales superficiales, a trabajar en exceso. Esta sobrecarga constante es una causa directa de dolor lumbar crónico, contracturas y una postura encorvada o, por el contrario, con una excesiva curvatura lumbar. En nuestra clínica de fisioterapia en Boadilla, utilizamos la ecografía funcional para mostrarte en tiempo real cómo se activa esta musculatura y enseñarte a recupera su función de manera consciente y efectiva.

Cómo una disfunción pélvica altera tu alineación corporal

Las disfunciones del suelo pélvico no solo provocan problemas locales como la incontinencia o el dolor pélvico, sino que desencadenan una serie de desajustes posturales que afectan a todo el cuerpo. Por ejemplo, una hipertonía o exceso de tensión en los músculos pélvicos puede provocar una retroversión pélvica (la pelvis se inclina hacia atrás), lo que rectifica la curvatura lumbar natural. Esta postura aplanada en la zona baja de la espalda aumenta la presión sobre los discos intervertebrales y puede generar dolor ciático o pinzamientos. Por otro lado, un suelo pélvico hipotónico o débil a menudo se asocia con una anteversión pélvica (la pelvis se inclina hacia adelante), acentuando la curva lumbar (hiperlordosis) y debilitando los músculos abdominales y glúteos. Esta postura, muy común en el postparto o en personas que pasan muchas horas sentadas, sobrecarga las articulaciones facetarias de la columna y puede derivar en artrosis vertebral prematura. Identificar y corregir estos desequilibrios es fundamental, y es un trabajo que abordamos a diario con pacientes de Majadahonda, Pozuelo y Las Rozas que buscan una solución definitiva a sus problemas de espalda.

La postura en deportistas: cuando el suelo pélvico marca la diferencia

En el ámbito deportivo, entender por qué el suelo pélvico es clave en la postura corporal es crucial para optimizar el rendimiento y prevenir lesiones. Los deportes de impacto como el running, el pádel o el crossfit generan un aumento significativo de la presión intraabdominal. Un suelo pélvico competente es capaz de gestionar este impacto, estabilizando la pelvis y permitiendo una transferencia de fuerzas eficiente desde las piernas hacia el tronco. Si el suelo pélvico no funciona correctamente, esta gestión de la presión falla. El cuerpo busca estabilidad en otros lugares, generando rigidez en la cadera, acortamiento de los isquiotibiales o sobrecargas en la musculatura lumbar. Esto no solo disminuye la potencia y la agilidad, sino que abre la puerta a lesiones como tendinitis rotuliana, fascitis plantar o pubalgias. En Danai Fisioterapia, trabajamos con deportistas para integrar el suelo pélvico en su entrenamiento, utilizando técnicas como el biofeedback para mejorar la conciencia y el control motor, asegurando que esta base sea fuerte, reactiva y funcional para soportar las más altas exigencias.

Señales de alerta: cuándo tu postura te está avisando de un problema pélvico

Muchas veces, el cuerpo nos envía señales que ignoramos o atribuimos a causas equivocadas. El dolor de espalda recurrente que no mejora con masajes convencionales, la sensación de pesadez en la zona baja del abdomen, o una rigidez matutina en las caderas pueden ser indicativos de que el origen del problema está en el suelo pélvico. Otras señales incluyen:

  • Dolor lumbar que empeora al estar de pie o sentado durante largos periodos.
  • Molestias en la zona del sacro o en las caderas sin una lesión aparente.
  • Una sensación de «abdomen hinchado» o diástasis abdominal, especialmente en mujeres tras el embarazo.
  • Pequeñas pérdidas de orina al toser, reír o saltar (incontinencia de esfuerzo).
  • Dificultad para activar correctamente los glúteos o los abdominales durante el ejercicio.
    Reconocer estos síntomas es el primer paso. El segundo es acudir a un fisioterapeuta especializado que pueda realizar una valoración completa. Mediante una evaluación postural detallada y el uso de ecografía, podemos determinar si la disfunción pélvica es la causa subyacente de tus problemas posturales y diseñar un plan de tratamiento personalizado.

El impacto del embarazo y el postparto en la postura y el suelo pélvico

El embarazo es una de las etapas en las que la relación entre el suelo pélvico y la postura se hace más evidente. El aumento de peso, el cambio del centro de gravedad y la acción de hormonas como la relaxina ponen a prueba toda la estructura musculoesquelética. El suelo pélvico debe soportar una carga cada vez mayor, lo que puede llevar a su debilitamiento. Simultáneamente, la postura se adapta: la pelvis se inclina hacia adelante y la curva lumbar se acentúa para compensar el peso del bebé. Tras el parto, si no se realiza una rehabilitación adecuada, estos cambios pueden cronificarse. Un suelo pélvico debilitado y una faja abdominal incompetente (a menudo con diástasis) dejan a la columna sin su soporte frontal y basal. Esto perpetúa el dolor lumbar, dificulta la recuperación de la figura y puede generar problemas a largo plazo. Por ello, la fisioterapia postparto es fundamental, no solo para tratar el suelo pélvico, sino para reeducar la postura y devolver la funcionalidad a todo el complejo abdomino-lumbo-pélvico.

Tratamientos avanzados para recuperar la sinergia entre suelo pélvico y postura

Abordar un problema postural originado en el suelo pélvico requiere un enfoque integral que vaya más allá de los ejercicios de Kegel. En Danai Fisioterapia, combinamos la terapia manual con la tecnología más avanzada para acelerar tu recuperación. Tras una valoración exhaustiva, que incluye diagnóstico por ecografía, diseñamos un plan de tratamiento que puede incluir:

  • Terapia Manual Miofascial: Para liberar tensiones en el diafragma, la pelvis y la musculatura profunda que puedan estar alterando la alineación.
  • Radiofrecuencia (Indiba): Una tecnología que mejora la vascularización y la elasticidad de los tejidos, ideal para tratar cicatrices (cesáreas, episiotomías) y musculatura hipertónica que afectan a la postura.
  • Terapia de Estimulación Magnética Extracorpórea (Magnetolith – EMTT): Esta innovadora tecnología regenera el tejido a nivel celular, siendo altamente efectiva para tratar el dolor crónico lumbar, la artrosis de cadera y las tendinopatías asociadas a desequilibrios posturales.
  • Biofeedback y Reeducación Postural Global (RPG): Herramientas clave para que tomes conciencia de tu suelo pélvico y aprendas a integrarlo en tus movimientos diarios y en tu postura global, corrigiendo los patrones incorrectos.
  • Punción Seca: Para desactivar puntos gatillo en músculos sobrecargados (lumbares, glúteos, piramidal) que perpetúan el dolor y el desequilibrio postural.

Este enfoque multifactorial nos permite no solo aliviar tus síntomas, sino corregir la causa raíz del problema, ofreciendo resultados duraderos a nuestros pacientes de Boadilla del Monte y sus alrededores.

Si sientes que tu postura te está fallando, si el dolor de espalda se ha convertido en tu compañero diario o si simplemente quieres asegurarte de que tu «núcleo» funciona de manera óptima, es el momento de actuar. Recuperar la funcionalidad de tu suelo pélvico es invertir en una columna sana, en una mayor calidad de vida y en un bienestar que se refleja en cada paso que das. En Danai Fisioterapia te ofrecemos una valoración honesta y un tratamiento individualizado para que entiendas por qué el suelo pélvico es clave en la postura corporal y cómo puedes recuperar el equilibrio. Contacta con nuestro equipo de fisioterapeutas expertos en Boadilla del Monte y da el primer paso hacia una vida sin dolor y con una postura saludable.